Alergia a frutos secos

¿Qué son los frutos secos?

Los frutos secos son un grupo de semillas provenientes de plantas, de grupos botánicos diferentes, que se consumen de forma desecada. Sin embargo, los frutos secos también tienen reactividad cruzada entre ellos y se consideran un grupo concreto en referencia a la alergia alimentaria.

Los frutos secos cuentan con un alto poder nutritivo y, por tanto, son muy importantes en la alimentación humana. Se consumen directamente o formando parte de productos de bollería y pastelería, en helados, en salsas o como aceites.

¿Es frecuente la alergia a frutos secos?

La alergia al cacahuete es muy frecuente en algunos países y la avellana, y dependiendo de las distintas edades de los pacientes y las diferentes áreas geográficas podemos encontrar diferente frecuencia en las manifestaciones alérgicas, como por ejemplo en España, donde la nuez se relaciona con un mayor número de reacciones alérgicas.

En los niños, la sensibilización a un único fruto seco es más habitual, mientras que los adultos suelen presentar sensibilizaciones múltiples. Es probable que la reactividad cruzada entre frutos secos y pólenes, sean los causantes de este aumento de la sensibilización.

Los frutos secos son, con las frutas, la primera causa de alergia alimentaria en los adultos.

¿Cuáles son los alérgenos implicados en la alergia a frutos secos?

A pesar de las familias botánicas a las que pertenecen los frutos secos, los alérgenos implicados se agrupan en un número limitado de familias y por eso se encuentra gran reactividad cruzada en este grupo de alimentos. La mayoría de los alérgenos corresponden al grupo de proteínas de defensa vegetal, al grupo de proteínas de almacenamiento, o a las profilinas que suelen ser muy similares entre los frutos secos y frutas y algunos pólenes.

Los frutos secos presentan estabilidad frente al calor y a los procesos digestivos, lo que implica que las reacciones sean con frecuencia intensas e inmediatas.

¿Qué síntomas producen las reacciones alérgicas a frutos secos?

Los frutos secos pueden inducir reacciones alérgicas de intensidad leve, como picor en la boca, estornudos, lagrimeo, enrojecimiento cutáneo; síntomas digestivos como dolor abdominal, vómitos, diarrea; o bien cuadros de urticaria, hipotensión o sensación de ahogo. Los síntomas pueden desarrollarse pocos minutos después de ingerir el alimento, o tardar algunas horas. No son frecuentes las reacciones por inhalación.

El síndrome de alergia oral (picor y enrojecimiento alrededor de la boca) es frecuente en paciente con alergia a frutos secos relacionados con la sensibilización al polen. Por regla general estos síntomas suelen ser leves.

La existencia de alérgenos resistentes tanto al calor como a los procesos digestivos, como las proteínas de almacenamiento o las de transferencia de lípidos, supone un factor de riesgo para reacciones graves o mortales.

En el área anglosajona, el alimento más implicado en este tipo de reacciones es el cacahuete, en Europa la avellana y en España la nuez.

¿Qué precauciones hay que tomar en la alergia a frutos secos?

Las precauciones son las mismas que otros alimentos, además sabiendo que muchas veces van ocultos en salsas o pasteles.

Unas cantidades mínimas pueden ser toleradas por la mayoría de pacientes alérgicos a frutos secos, pero existen determinados pacientes, que pueden presentar reacciones alérgicas con estas cantidades.

Hay que tener en cuenta que algunos factores como el ejercicio tras la ingesta de frutos secos o sudar, o la ingesta concomitante de antiinflamatorios son capaces de desarrollar reacciones en pacientes sensibilizados, y en cambio pueden tolerarlos si no se presentan estas circunstancias.

Ver Recomendaciones para pacientes alérgicos a frutos secos.