¿Qué es la luz solar?
La luz emitida por el sol, imprescindible para la vida, es una energía de radiación electromagnética que comprende, fundamentalmente, los espectros ultravioleta, visible e infrarrojo; aunque también están presentes longitudes de onda más cortas (radiaciones ionizantes) y mucho más largas, como microondas y radiofrecuencia.
La radiación ultravioleta se divide en UVA de 320 a 400 nm, UVB de 290 a 320 nm y UVC de 200 a 290 nm. La UVC, que es la fracción de menor longitud de onda y la más peligrosa, no llega a la superficie terrestre, al ser absorbida por la capa de ozono que también filtra una parte importante de la radiación UVB.
¿Cómo varia la radiación ultravioleta solar?
La cantidad y composición de la radiación ultravioleta solar depende de :
- Latitud: la intensidad de la radiación es mayor en el ecuador disminuyendo progresivamente al acercarnos a los polos.
- Altitud: la intensidad de los rayos ultravioleta aumenta con la altura
- Espesor de la capa de ozono: el ozono absorbe gran cantidad de radiación ultravioleta.
- Hora del día: la radiación es más intensa entre las 11.00 y las 16.00 h.
- Estación del año: en verano los rayos inciden más perpendicularmente y por tanto la radiación es mayor.
- Efectos de reflexión: la radiación aumenta por el reflejo de algunas superficies como la nieve o la arena.
- Factores atmosféricos: la nubosidad, la polución, la humedad, etc., pueden afectar a la sensación con la que la percibimos, favoreciendo la posibilidad de sobreexposición.
¿Cuáles son los efectos negativos de la exposición solar sobre la piel?
La exposición solar provoca efectos agudos:
- Eritema leve hasta quemadura es al respuesta inflamatoria como respuesta al daño de los radiaciones UVB
- Cambio de pigmentación o bronceado debido a una primera fase a los radiaciones UVA y después una fase más duradera a los UVB. El bronceado ofrece una protección parcial inicial sobre las quemaduras solares.
- Depresión inmunitaria por las radiaciones UVA y UVB
Los efectos nocivos tardíos o crónicos son:
- Fotoenvejecimiento: se refiere al envejecimiento prematuro de la piel por la exposición a radiación ultravioleta. Aparacen arrugas profundas, pérdida de elasticidad, alteraciones de la pigmentación (léntigos solares, pequeñas manchas blancas despigmentadas) y de la vascularización (pequeñas venitas, arañas vasculares).
- Fotocarcinogénesis: pueden parecer lesiones tumorales benignas, premalignas y malignas. Aparte del melanoma, que es el menos frecuente y más grave, existen otros tipos de cáncer de piel: el carcinoma espinocelular y el basocelular.
¿Qué es la alergia al sol?
En términos populares se entiende por alergia al sol un amplio grupo de procesos que cursan con una respuesta cutánea anormal producida, desencadenada o agravada por una exposición que consideramos normal a la luz solar.
Pero reservamos el término de alergia al sol para un pequeño grupo de estas patologías que están mediadas por el sistema inmunitario.
Realmente no se trata de una alergia al sol sino de reacciones alérgicas que requieren de la exposición a la luz para su aparición. Y necesitan de un fotosensibilizador responsable.
La radiación UVA está implicada en la mayoría de las reacciones.
Como fotosensibilizadores más frecuentes tenemos:
- Medicamentos: antibióticos, antiinflamatorios, antihipertensivos, diuréticos, antiepilépticos, quimioterápicos, antiacné.
- Cosméticos, filtros solares y perfumes.
- Plantas.
- Productos industriales, agrícolas y ganaderos.
¿Qué síntomas puede producir?
Las características clínica pueden ser muy variadas, pero cursan con lesiones localizadas principalmente en las zonas expuestas a la luz solar, tales como la cara (oreja, nariz, mejilla), la parte anterior del cuello y el dorso de las manos y antebrazos, dibujando el límite de las mangas y respetando típicamente la zona de flexión.
La afectación de las piernas, más frecuente en mujeres, es más intensa en la zona anterior.
Se respetan, de manera característica, el cuero cabelludo y otras áreas densamente pobladas de pelo, párpados superiores, zona retroauricular y bajo el mentón, espacios interdigitales y el fondo de los pliegues o surcos cutáneos
Pueden producirse reacciones fotoalérgicas, reacciones fototóxicas, urticaria solar y erupción polimorfa.
¿Qué es una reacción fotoalérgica?
Las reacciones fotoalérgicas representan un tipo especial de reacciones de hipersensibilidad retardada en la que se requiere simultáneamente el contacto o la exposición a una sustancia exógena y la participación de la luz. Con la acción de la luz esa sustancia se convierte en un fotoalérgeno.
Precisan de un período de sensibilización, es decir, necesitan un contacto previo con el agente sensibilizante. Pero exposiciones posteriores con las misma sustancia y la luz, desencadenarán nuevamente lesiones dentro de las primeras 48 horas.
Clínicamente, las reacciones fotoalérgicas se caracterizan por la aparición de una erupción de tipo eccematoso con picor y localizada, predominantemente, en áreas expuestas a la luz, pero pueden rebasar la zona irradiada y a pesar de suprimir el fotosensibilizante, las lesiones persisten varias semanas.
Actualmente la causa más frecuente son las cremas solares que llevan PABA, y los antiinflamatorios y antihistamínicos de uso en cremas. Anteriormente eran más frecuentes los jabones desodorantes y algunos perfumes.
Se debe tratar la erupción cutánea con el tratamiento sintomático acorde con la gravedad del cuadro: Los corticoides tópicos son la primera arma terapeútica, aunque en ocasiones puede ser necesario el uso de corticoides sistémicos (orales o inyectados). Los antihistamínicos ayudan a controlar el picor.
En segundo lugar, se debe evitar la exposición solar y extremar las medidas de protección.
Finalmente, es fundamental la evitación del agente causal.
¿Qué es una reacción fototóxica?
Son reacciones inflamatorias debidas a la transformación de sustancias químicas administradas al paciente y que se depositan en la piel y por acción de la luz producen lesiones cutáneas por daño directo en la piel.
Existe un amplio número de medicamentos fototóxicos que, tomados en cantidad suficiente y con la radiación apropiada, producen en el paciente una erupción cutánea, en las áreas expuestas al sol, similar a una quemadura solar exagerada, que afecta alas áreas de piel expuestas con sensación punzante o quemante, que posteriormente puede derivar en hiperpigmentación. Suele mejorar en una semana.
Si la reacción es muy intensa, pueden formarse ampollas. Dicha reacción no es una alergia y, por lo tanto, no requiere una sensibilización previa; es decir, puede aparecer tras el primer contacto con el medicamento.
Los psolarenos, las fenotiazinas, la amiodarona, antiinflamatorios no esteroideos (piroxicam, ketoprofeno, naproxeno), antibióticos (tetraciclinas, quinolonas) o diuréticos (tiazidas y furosemida) son agentes fototóxicos bien conocidos. También lo son algunas plantas y perfumes que contienen estos agentes.
¿Qué es la urticaria solar?
La urticaria solar es un trastorno raro que se produce a los pocos minutos de la exposición solar. La piel se enrojece, aparecen habones dispersos, que tienden a confluir formando placas que desaparecen en horas al cesar la exposición solar.
El tratamiento se basa en abstenerse de la exposición al sol junto con la adecuada fotoprotección, y en el uso de antihistamínicos en caso de aparición de las lesiones. En casos más graves, en los que la erupción persiste, puede ser necesario realizar una inducción de tolerancia con PUVA.
¿Qué es la erupción solar polimorfa?
La erupción solar polimorfa es una de las fotodermatosis más frecuentes y llega a afectar hasta a un 15-20% de la población general.
Se caracteriza por la aparición de una erupción cutánea de morfología variada entre 2 a 5 horas tras la exposición solar, que se localiza de manera predominante en la cara, escote, antebrazos y zona anterior de las piernas, el picor precede casi siempre a estas lesiones.
Aparece en las primeras exposiciones solares (primavera o principio de verano) y mejora tras exposiciones repetidas a medida que la piel se broncea. Vuelven a desencadenarse al año siguiente.
En general no entraña gravedad y una adecuada protección solar, exposiciones cortas y progresivas y, ocasionalmente, el uso de antihistamínicos suelen ser suficientes para su control.
¿Qué hacer si se manifiesta una reacción exagerada al sol?
En el caso de presentarse reacciones exageradas tras la exposición al sol se debe consultar con el médico.
Pero ante todo hay que prevenir siempre antes de exponerse al sol siguiendo unas normas durante la exposición al sol y más, cuanto más blanca esté la piel.